La primera clase

Hoy empiezo la universidad y mi primera clase es la de literatura, segun el panfleto que me dio el jefe de estudios, mi profesor se llama Aioros y ya vi su foto en el panel del personal...
Llego al aula y veo que todavia no ha llegado el profesor, de hecho la clase esta completamente desierta ni tan solo hay otros alumnos, asi que no me queda otro remedio que ser paciente y esperarme hasta que alguien haga acto de aparicion. Tan solo espero que las clases no vayan a ser como el plastazo que teniamos en mi anterior escuela porque aquello era verdaderamente insoportable, aunque algo me dice que no sera asi...

Entretanto busco asiento y saco un cuaderno de dibujo en el que me pongo a hacer unos cuantos garabatitos mientras que llega el profe.

**Iban hacer casi los 8:30 de la mañana pero aún quedaban algunos minutos. El día que hacía en la universidad era expléndido. Los pajaros volaban sobre el crepúsculo y sus bellas sinfonías se escuchaba por toda la cátedra. El firmamento estaba totalmente despejado, no había ningún rastro de nubes que pudieran estropear el lindo día que hacía. Muchos estudiantes entraban como su primer días, más otros seguían con su vida de universitarios cotidianos.

La Universidad tenía grandes medidas, se podría decir, que era reconocida como una de los mejores del país. Había mucho ruido sobre el ambiente escolar; unos se contaban cosas, otros cuchichaban u otros simplemente pasaban por desapercibido.

Llegué con mi coche a la Universidad, era mi primer día como profesor, pero a pesar de todo tenía las ídeas muy claras. Me mostraba seguro siempre de mi mismo e iba a tomar a los alumnos que me tocasen como un reto a seguir, para continuar en el camino del aprendizaje, tanto como para persona como para mi profesión.
Salí del automóvil y alzé mi vista sobre la facultad, no me podía creer lo inmenso que era, cerré el coche y me propuse a caminar hacía al entrada. Seguí un camino que llevaba al recibidor del instituto, noté mucho mucho de los alumnos me miraban, unos se reían, otros miraban con cara de odio y otros simplemente me mostraban su indiferencia.
Al fin llegué al acceso de éste, una persona me indico todo lo que tenía que saber para empezar con mi primera clase. Me llevó al segundo piso donde se encontraba mi aula, faltaban casi unos 2 minutos para que empezaran las clases. Le agradecí a la compañera que me trajera a mi aula y abrí la puerta que me conduciría sobre ésta.
Ese día vestía con un pantalón de pana negro, una camiseta con botones azul verdoso y cuadros blancos, acompañado de una corbata oscura, un abrigo color café que complementaba un chaqueta gris. Finalmente doy el primer paso al aula y observo a todo el alumnado, aún no estaban todos, pero era de esperar, no había tocado la campana aún.
Mi mirada es seria, pero de orgullo por dentro, doy unos pasos hacía mi mesa y dejo mi portafolios con mis cosas. Andé unos pasos haciala ventana.... cuando la campana suena de repente y oigo como un ruido cada vez más se acerca al aula.... en efecto eran los alumnos.
A simple vista ningun alumno me llama la atención pero quería saber lo que pensaba de la literatura.

-Aiolos: Por favor entrar en silencio y tomad asiento -el ruido seguía y me situé en el centro de la pizarra esperando a que todos ocuparan sus sitios y empezar con las presentaciones Secrets.El silencio se hizo sobre en la clase aunque unos murmullos se comenzaron a escuchar de fondo.

-Aiolos: Chicos un poco de silencio por favor -el ruido cada vez fue cesando de manera continua hasta que me dejaron hablar- Soy Aiolos vuestro nuevo profesor de Literatura de la Univerdad


-Aolos: Me gustaría saber vuestros gustos, lo que aspiráis a la vida y de que forma veis la literatura. Más que una materia, será como una enseñanza que os puede ayudar a todos, en todos vuestros ámbitos, ya sea para vuestra pareja, como también para conseguir un trabajo -Algunas risas de desataron en el aula, aunque mi semblante era sería.

Fuí preguntando a varios alumnos hasta que llegué al sitio de un chico, y le musité con voz de seguridad.


-Aiolos: ¿Y usted como se llama? -observé al joven mancebo, no pude ver su apariencia bien.. Saqué mis gafas de mi chaqueta y lo pude apreciar mejor...**

Estaba haciendo algunos esbozos en mi cuaderno pero me canse tras unos minutos y me puse a mirar por la ventana pues hacia un hermoso dia soleado. Los demas ya iban llegando a la clase, podia oir el eco del murmullo de varias voces, los ruidos de los pasos que se acercaban y abrian la puerta. Varios muchachos y muchachas entraron y ocuparon sus asientos.
Aquel fue el momento cuando decidi dejar mis libros a la vista a la espera del profesor, el cual no tardo mucho en llegar. Es un hombre joven (de hecho, no creo que sea mucho mayor que yo) alto, de cabello corto castano oscuro y muy bien parecido... No creo que lleve mucho tiempo de profesor pues le costaba un poco mantener el orden mientras hablaba y se presentaba.

*Aiolos... que nombre tan bonito*

Algo que me hizo enrojecer hasta la medula fue el que se me acercara a preguntar mi nombre.
-Me llamo Shura Reus del Vall, profesor.- le conteste lo menos nerviosamente que pude.

**Aquel chico jóven había respondido algunas de las preguntas mencionas por el profesor. A grandes rasgos aquel alumno le recordó a alguien....... ambos se estubieron mirando, pero aquel momento se dicipó con el comentario de uno de los alumnos que fué muy basto.

-Aiolos: Un nombre curiosos sin lugar alguna -sonreí, cerrando mis ojos para unos segundos después abrirlos y mirar de nuevo al chaval- ¿Y vos a qué aspiráis para vuestro futuro? ¿ De qué forma véis la literatura? -pregunté con voz firme, noté un poco nervioso o algo incómodo o quizás simplemente era mi imaginación.

Algunos de los alumnos prestaban atención, mientras que otros parece ser que no les interesaba para nada....**

Desde luego que no entiendo a esta gente que viene a las clases tan solo para molestar, si de veras no les interesa la asignatura, para que vienen? No es que yo sea un angelito personificado, ya que en mis tiempos tambien hice de las mias en el cole.

Flashback
Dia crudo de invierno en el que la calefaccion central de la escuela no funcionaba y nos dieron una estufa portable por clase. Desgraciadamente la clase era muy grande y tan solo la gente que estaba cerca (pues no habia sitio suficiente para moverla) recibia algo de calor, pero eso no es todo. Durante los intervalos entre una clase y otra, los alumnos sacabamos los bocatas de la hora del recreo y nos poniamos a hacer tostadas antes de que llegaran los profesores. MIentras que esperabamos al profe de ciencias a M. Dominguez se le ocurrio poner un bocadillo de queso que acabo derritiendose y pegandose a la rejilla de la estufa...

Fin flashback.

Volviendo a la realidad, escucho la pregunta del profesor.Aiolos.
-La literatura como cualquier forma de expresion es un reflejo de la vida y las costumbres sociales de la epoca de cada escritor, como por ejemplo en "El Buscon" de Quevedo, el protagonista principal es Pablos, un muchacho pobre, del cual no se espera que haga mucho en la vida y que tiene que ganarsela como pueda al margen de la ley y que siempre intenta hacer lo mas posible por salir de tal situacion sin llegar a conseguirlo. Quevedo da numerosos detalles acerca del modo de vida de las diferentes clases sociales, tambien de los castigos que se aplicaban a los criminales si los atrapaban.

Hago una pausa esperando que alguien mas tome la palabra o haga algun comentario, pero nadie lo hace, excepto algun que otro idiota que murmura algo por lo bajito. Me trae sin cuidado lo que digan, lo que me molesta es que no demuestren respeto por otras personas, ni por los otros alumnos ni por el profesor. Mi primera impresion suya es favorable, parece una persona muy agradable, su nombre es inusual pero muy bello y me gusta el tono de voz que usa...

-A mi me gustaria ser traductor y tambien encuentro fascinante el modo en que muchas palabras y expresiones han cambiado a lo largo del tiempo en significado.

**En la clase de literatura seguían las presentaciones de cada uno de los alumnos, el ruido cada vez se hacía con el aula hasta llegar a escucharse fuera de ésta. El profesor Aiolos estaba algo acostumbrado a esto, ya que la mayoría de los chicos no les agradable nada la literatura, y no hacían más que decir memeses y fantochadas. El profesor de vez en cuanto y mientras que converzaba con uno de los alumnos, hacia callar a los demás para que todos la pudiese oir.

Mi atención estaba centrada en uno de los alumnos, tras mis preguntas mencionadas, cada vez mostraba más interés, era de los pocos alumnos que la literatura les gustaba y sonreí, sus ojos mientras que mencionaban esas palabras eran especiales, lo decía de corazón y no simplemente por hacerme la pelota. Me senté encima de su mesa para tratar de debatir con ella, quería hacerle mil preguntas, pero era algo imposible.

-Aiolos: Callaros todos por favor y escuchar -me giré sentado sobre mi propio eje y con voz firme pero sin chillar mencioné esas palabras, luego giré mi rostro nuevamete a mi emplazamiento original.

-Aiolos: Veo que te gusta el barroco, en efecto el titulo "La vida del Buscón llamado don Pablos " tiene esas características mencionadas por ti; su reflexión sobre la sociedad es muy interesante, tanto que en un primer plano se reconocería como realista, pero su actitud es tan crítica que no se lo puede reconocer como tal. Veo que te agrada la literatura español -sigo sonriendo a lo lejos se escuchan las ramas de los árboles que golpean con el viento- Te aconsejaría mucho el romanticismo, ya que posee unas características increíbles, así como también historias de románticas dónde te puedes dar cuenta las barbaridades que puede llegar hacer el ser humano por amor, pero sabes..... -cierro mis ojos y respiro profundamente- El contemporáneo también es muy bueno, uno de mis escritores favoritos es Carlos Cauthemoc, yo creo que no todo en la literatura deba ser leer y aprender la propia vida de los que vivieron aquella época, sino algo más allá, lecciones que nos puedan ayudar en la vida diaria, consejos que te puedan ayudar cuanto tengas una situación que no sabrías controlar, o simplemente lecciones que te hagan distinguir qué es bueno y qué es lo malo- me levanto del pupitre y del bolsillo de mi camiseta saco un pañuelo para limpiar los cristales de las gafas, para posteriormente ubicarla en el mismo sitio.

Miro a todos los alumnos y les digo:

-Aiolos: Shura tiene razón, escuchadle, él quiere ser traductor y nos acaba mencionar que le fascina como le maravilla leer u oír palabras y expresiones que a lo largo de tantos años han ido modificándose, eso es lo que aprenderemos aquí. Si lo pensáis bien, en el reino animal y así, los animales fueron evolucionando y lo mismo pasó con las plantas, desgraciadamente lo antiguo se queda atrás para dar paso a lo nuevo, a lo renovado.

Seguía de pie y esa clase la aproveché para hacerles ver a los chicos otra forma de mirar la literatura. La campana sonó y muchos chicos apenas había sonado, ya estaban en la puerta para salir, veo al chico que me llamó mucho la atención y le digo.


-Aiolos: Veo que te gusta mucho la literatura, muy pocas veces puedo ver algo como esto -los chicos casi todos ya estaban saliendo, los últimos en salir fueron dos chicas que se reían, pero no les daba mucha importancia.....**

El profesor es muy amable y es una lastima que muchos de los presentes no puedan apreciarlo. !Ellos se lo pierden!. Sus gestos son elegantes.
-Asi es, profesor, la literatura me gusta muchisimo, desde pequenito siempre me ha gustado mucho leer... en casa siempre me decian que se me gastaria la vista con tanto libro.... (Cambiando de tema) Lo de que la literatura espanola, tanto en castellano como en catalan, me guste va por descontado al ser la literatura de mi tierra y la que estudie siendo nino.

Quizas le parezca que estos comentarios vengan a cuento, a veces soy demasiado locuaz sin darme cuenta.
-En particular me gustan los clasicos, como El Buscon y Don Quijote, y no tan solo por ser un reflejo de la sociedad de su tiempo. Muchos de estos personajes o por lo menos algunos aspectos de ellos los podemos ver en la vida real, en personas reales y tambien estoy de acuerdo en que podemos aprender valiosas lecciones en como actuar en la vida normal... o como no hacerlo, yo por lo menos, no arremeteria contra unos molinos creyendo que son gigantes, a veces hay que reflexionar antes de actuar sobretodo si se trata de una situacion dificil, no?

Reflexiono sobre los otros estilos y autores antes mencionados.
-De los romanticos me gusta mucho Becquer, el poeta sevillano. Otros autores favoritos son Juan Ramon Jimenez e Isabel Allende. A Carlos Cauthemoc no lo conozco, podria recomendarme algun trabajo suyo?

Mi primera clase de universidad... un exito. El joven que nos da clases, nuestro profesor no aparenta ser mucho mayor que nosotros, es una persona muy agradable y alguien muy apasionado por su asignatura. Sus clases son muy diferentes de las que yo estaba acostumbrado en el colegio, pues alli las discusiones se centraban mas bien en los reflejos sociales y las tecnicalidades del relato mas que en lo que el menciono anteriormente, asi que sera muy interesante el conocer su punto de vista.
No solo eso, !ay madre si el supiera lo que estoy pensando!, tambien me agrada mucho el timbre de su voz, su manera pausada al hablar y a la vez firme cuando alguno de los otros estudiantes se pasaba de la raya, su bonito nombre y sus bellas facciones...

*Vamos Shura, !despierta!, que se trata de tu profesor...* me dije a mi mismo. No podia dejar de observar cada uno de sus movimientos hasta que al fin recogi mis cosas y decidi salir de alli a toda prisa cuando el profe se despidio.
-Muchas gracias por la clase, yo la disfrute mucho....- le dije algo nervioso y al salir por la puerta no mire bien por donde iba y choque contra algo que hizo que todos mis libros y demas trastos que llevaba encima cayeran al suelo.

Mascullando una pequena maldicion me puse a recogerlos.

**El profesor seguía recogiendo sus cosas para posteriormente dirigirse a la siguiente clase, que era con 4 A. Por lo que le habían comentado, aquella clase era de las peores, en parte Aiolos estaba algo incómodo, pero viendo de otra forma, para él, ese tipo de clases, suponía un verdadero reto para su carrera profesional. Eran casi las 9:30 de la mañana, la segunda clase había empezado hace unos minutos.
La estridencia de los alumnos cada vez se disipaba, como cuando llueve de manera muy fuerte y va disipándose poco a poco.

Había acabado de terminar de recoger casi todas mis cosas, escucho como Shura me agradece porque le di clase, dibujo una sonrisa en mi rostro para decirle después:


-Aiolos: No debes agradecerme nada, para mi enseñar a personas como vos, me reconforta mucho, espero que sus compañeros sigan el mismo ejemplo que tomáis vos al disfrutar la clase como lo hace mi persona -era de los pocos alumnos que me alegraban darles clase, los días así con chicos como él, pasaban rápido, el trabajar no era una necesidad, se convertía por ese momento en segundo plano.


Notó que el chico se levanta, yo después de unos segundo hago lo mismo, observo que se tropieza contra el marco de la puerta y se le caen todos los libros que cargaba en la mano y algunos de la mochila, inmediatamente me aproximé hacía el mancebo y me arrodillé para comprobar si se encontraba bien por el golpe que se hizo:


-Aiolos: ¿Os encontráis bien Shura? ¿Os habéis hecho mucho daño? -Le miro a los ojos y empiezo ha acariciar el hombro por si tendría algún moratón o algo. Esta experiencia me recordó a algo que le pasó a una de mis alumnas de otra universidad, por un descuido similar se fracturó dicha parte y estuvo casi 3 meses sin poder ir a clase, lo que le acarreó perder una beca que con tanto esmero le había ganado........**

Me debi poner tan rojo que debia parecer el hermanito gemelo identico de un tomate y no solo en la parte que me habia golpeado con el marco de la puerta. Por suerte, no parezco tener danos mayores, tan solo me siento enormemente avergonzado; este tipo de situacion es muy divertida cuando se mira en retrospectiva o !mejor aun! cuando le ocurre a otra persona, pero ahora mismo tan solo puedo maldecirme a mi mismo por ser tan descuidado.
El profesor acudio de inmediato en mi ayuda y mientras me ayudaba a recoger todos los libros me pregunto si estaba bien, en su rostro podia leer algo como preocupacion.

-Esto... ehmmm.... gracias, profesor... creo que lo unico que ha resultado herido es mi amor propio. Espero que a la universidad no le de por pedirme danos y perjuicios ocasionados al marco de la puerta... -le dije con una risita nerviosa tratando de no darle importancia al asunto y sonrojandome aun mas, tanto que la piel me ardia.

Sonrei algo nervioso al verlo tan de cerca, mirandome fijamente y acariciando mi hombro. Aquel leve contacto, me hacia perderme en mi imaginacion... !Vamos, Shura, despierta!

**Me quedé muy aliviado, al comprobar que Shura no se había hecho nada, no me gustaría nada que me hubiese ocurrido el mismo incidente que ya tuve antaño. Le ayudé a recoger las cosas que se le habían caído con el tropiezo que se había dado. Algunos libros se los coloqué en la mochila y otros se los di en la mano para que no se les cayeran. Noté algo raro en aquel mancebo, me daba la impresión que mi presencia le incomodaba mucho, a priori era así.

Sonrío por el comentario de daños y prejuicios y le niego con mi testa. Me levanto y extiendo mi mano para que el chico se levante:


Aiolos: Me alegro saber que estáis bien, tratad de ir con cuidado por donde vayáis, porque no me permitiría perder a mi primer alumno que me ha caído de maravilla -Pude aprecia que el chico era de muy buen ver, en aquella clase noté como algunas de las chicas lo miraban, pero me daba la impresión que era un poco tímido o nervioso, es muy raro, ya que normalmente la gente que lee, sabe desenvolverse muy bien en varias situaciones.

-Aiolos:Tened cuidado ¿vale?, por si acaso...¿ Sabéis dónde se encuentra la clase de cuarto A? Ando muy perdido en la universidad, es muy grande e igual me pierdo..-dije con voz clara y sutil, mientras esto ocurría, algunas personas en la zona de jardín se hallaban hablando. Era increíble... el primer día de clases y el primer día que los algunos de los alumnos hacían pellas....**

Su primer alumno que le ha caido de maravilla? Sonrei al pensar que por lo menos en la clase le habia causado una buena impresion, la verdad que no me esperaba aquellas palabras tan amables acostumbrado como estoy a que los profesores en su mayoria nos trataran en el colegio como ninos estupidos o que se impacientaran con nosotros.
El que es nuevo se notaba a la legua, el pobre no tenia ni idea de como llegar al aula donde tenia que impartir su siguiente clase y estaba obviamente preocupado por causar una buena impresion tanto ante los alumnos como el plantel de profesores o al menos, asi me lo parecio. Lo malo es que estaba preguntando a la persona equivocada pues yo tampoco conocia los ires y venires de este lugar.

-Lo siento, profesor, pero yo tampoco lo se y aunque lo supiera, mi sentido de la orientacion es desastroso, sobretodo a la hora de dar indicaciones. Ya hace algun tiempo di todas las indicaciones correctas acerca de donde girar, cuantas calles debian pasar, etc. a un senor que conducia una furgoneta, lo malo es que al poco de alejarse me di cuenta de que lo habia enviado en direccion contraria... A una senora que me pregunto por el museo de Bellas Artes le di una direccion tan confusa que tuve que tomarla de la mano y llevarla yo mismo al lugar.

**Los dos chicos, el profesor y el alumno, se situaban justo en la entrada de la clase, allí Aiolos le estaba preguntando si sabía donde estaba la clase, pero parecía que el joven no tenía ni idea.

En frente del chico, esperaba a que me dijera dónde se encontraba la clase, pero a escuchar su respuesta, a priori no tenía ni idea, sonreí por su comentario, y le contesté con serenidad.


-Aiolos: No creo que voz no sepáis orientar a una persona, todo el mundo puede, Por ejemplo -dirijo mi mirada hacia el techo del pasillo del edificio y comienzo a pensar en como dirigir mis ejemplo- Es muy fácil, si sabe como llegar a vuestra casa, también sabréis que camino deba tomar la persona que quiera ir a "X" lugar. ¿ No crees? -pregunté y miré mi reloj, era tarde, ya la segunda hora había empezado y le dije con prisa.


-Aiolos:Ha sido un placer el entablar esta conversación con vos, espero apañármelas para poder ir a la siguiente clase -dije casi despidiéndome del chico, mientras que movía mi rostro hacia arriba y hacia abajo, mirando el número de las clases, y con suerte a lo mejor encontraba en la que tenía que impartir la clase...**

-Hasta manana entonces, profesor.

Lo vi marcharse, y pense con pesadez en como demonios me iba a esperar 24 horas hasta verlo de nuevo. *Pues fastidiate, porque no vas a tener otro remedio?*. En fin, el pasillo pronto volvio a llenarse de gente, asi que lo que hice a continuacion fue mirar mi programa de estudios y echar a caminar hacia la siguiente clase; tan solo esperaba llegar antes de que la campana sonara pues no hay nada mas embarazoso que el llegar tarde.

El resto del dia transcurrio sin percances y me las arregle para llegar a mi casa sin perderme. No es que en si mi sentido de la orientacion sea tan malo, el problema es que no se como explicarme a la hora de dar indicaciones, sin formarme un buen lio. Me resulta dificil pensar en el abstracto, aunque si veo las calles o el lugar delante mio no suelo tener demasiados problemas a la hora de guiar. La mejor clase de hoy sin duda alguna, pondero despues de la cena, !ha sido la de literatura!.

!Ardo en impaciencia a que llegue manana!...

Shura llega al aula dispuesto a atender su segunda clase.

**La clase ya había acabado, yo continué mi primera jornada con normalidad, no hubo ningún percance por el resto del día. Mis compañeros de trabajo me felicitaron por el día, que para ser el primero, lo había hecho bien. Salí de la universidad, mi jornal había acabado cerca de las 17 horas, estaba alo exhausto, me subí al coche para posteriormente dirigirme hacia mi hogar, donde me esperaba una ducha caliente, una buena cena y mi mascota.

Segundo día de clases, me levanté cerca de las 7:30 de la mañana, me dirigí a la ducha y me duché, para luego vestirme, asearme y peinarme. Eran casi las 8 a.m. tomé un croissant y me monté en el coche; a continuación me puse en marcha hacia la facultad.
Como es costumbre hice la habitual rutina. La primera hora transcurrió bien....El sonido del timbre daba paso a la siguiente hora, no estaba muy al tanto aún de los horarios, así que solo seguí las indicaciones que me había facilitado el director.



-Aiolos: Vaya esta clase me suena.....-pensé y dirigí mi mirada hacia el techo, a la vez llevé mi diestra a mi mentón para cavilar bien mis ideas.
Subí al segundo piso, miré el papel y luego el cartel de la clase. -Si es esta...-me digo a mi mismo.

Entro a la clase y veo de nuevo el desorden por parte de los alumnos. Hoy estaba muy feliz por el día, todo iba de maravilla.
Hacía un día de frío, los cielos estaban totalmente nublados, varias galernas frías azotaban los "brazos" de los árboles, algunos frutos eran echados de éstos y a los verdes pastos de la tierra los tomaban para continuar con una cadena de supervivencia. Parecía que nevaba o que podría llover, no era un clima muy bueno, pero aquel tiempo climatológico no pegaba nada con el estado de ánimo del profesor.



-Aiolos:Saludos Alumnos ¿ Cómo os encontráis todos hoy? ¿Que habéis hecho? -pregunté en general y algunos se animaron a contestar, se hizo un poco el ruido en la clase, pero no era exagerado como otras clases que chicos de colegio que ya había estado, miré de reojo al chico de nombre tan exótico y sonreí... A pesar de la jornada de ayer, el chaval era buen alumno y muy aplicado...**

Habia algo de ruido de fondo en la clase debido al cuchicheo que se llevaban algunos companeros unas filas mas atras, aunque la situacion estaba mas calmada que ayer. El tiempo hoy es un poco raro, quizas un poquito deprimente para algunos pero a mi me recuerda mucho a mi pueblecito de las montanas, asi que en un dia como estos a veces me da un poquito de morrina.

El profesor llego a clase, parecia venir con el animo bien dispuesto pues su tono de voz al saludarnos era muy jovial. Creo que es buen profesor, porque no tan solo parece interesado en la materia sino tambien en nosotros personalmente. Algunos contestan a su amable pregunta, yo no quise ser el primero pues no queria que pensara que tan solo le estaba haciendo la pelota, tal como ya me paso en otra ocasion en mi anterior escuela con uno de mis profesores.

-Yo estuve en la biblioteca para ver si podia encontrar una copia del libro que recomendo ayer.

Perdona por la tardanza, pero tuve que buscar algunos detalles sobre el poeta. Espero que mi respuesta no sea demasiado desastrosa.
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Aioros parecio muy sorprendido de que hubiera tomado un interes tan rapido en el autor que me menciono, tal vez no muchos de sus estudiantes respondian tan enfaticamente pero desperto mi curiosidad sobre este libro y siempre me gusta leer material nuevo, sobretodo si es de un autor al que no conocia previamente.
Le agradezco su oferta de prestarme su copia del libro, ademas de que seria una buena oportunidad de poder hablar con este joven tan amable un poquito mas. Tal vez sea algo irrespetuoso pero no parece mucho mayor que yo, creo que debio graduarse recientemente.

El topico de hoy parecen ser los poetas romanticos y pregunta especificamente acerca de Gustavo Adolfo Becquer, el poeta sevillano del siglo XVIII. Un tanto tragica su vida, pues murio siendo bastante joven y la mujer a la que amaba y se convirtio en su musa no acepto en casarse con el pues la vida del artista era bastante precaria, demasiados sobresaltos, sin saber de donde vendria el siguiente plato de comida por asi decirlo. La mujer con la que logro casarse le dio algunos hijos pero le fue infiel.

-Su musa fue la artista Julia Espin y ella fue quien inspiro muchas de las Rimas, como por ejemplo.
Tu me preguntas, que es poesia?
mientras clavo mi pupila en tu pupila azul
y yo te contesto, y tu me lo preguntas?
poesia, eres tu.

[Ok no hay problema, yo no he podido postear este finde porque lo tuve muy ajustado.]

**El profesor preguntó al alumno y el chico contestó de una forma que nadie lo había hecho, se notaba que el mancevo entendía de literatura Española.
La semblante de Aiolos era muy extraña, como que no esperaba una respuesta de tal maña, pero después de asimilar la información, sonrío y dijo.

-Aiolos: Que profundo, a eso me refiero -miro a todos los alumnos- Tenéis se sentir las palabras, la poesía como Shura -lo miré con orgullo y mi euforía junto con mi alegría me acompañaban por encontrar a tal alumno.

La clase ya había concluido, muchos alumnos salieron y como siempre, Shura fue el último en salir. Me acerqué y le dije.

-Aiolos: Que os parece si quedamos en el bar de la esquina y os enseño alguno de los libros del autor que os dije, vamos si podeis -dije preguntandole, la verdad es que la idea de poder intercambiar ideas con un chico de la universidad me gustaba, sobretodo si a este le encantaba la literatura**

Me sonrojo con los halagos que el profesor me hace en clase, pues siento como todos los ojos se clavan en mi y lo cierto, es que me da algo de corte en ser el centro de atencion. No obstante, con el esas palabras parecen sinceras y no hay malicia alguna, ademas cualquier cosa proveniente de el suena como musica celestial.

!Dios! !que cursi me estoy poniendo!, pero lo cierto es que desde que lo vi entrar, me quede obnubilado al verlo. Nunca habia conocido a alguien asi, tan joven pero que parece sapientisimo para su edad y apasionado en el tema que ensena. !Calma, Shura! y !concentrate!.

Al terminar la clase me pregunto si queria acompanarlo al bar y discutir temas literarios con el.

-Me encantaria, profesor Aioros. Tengo un par de horas libres entre clase y clase y no me importaria pasarlas con usted, su clase es muy amena y me interesaria conocer mucho mas de los libros que menciono.

* y de mi profesor*-penso Shura.
Ambos salimos de clase y llegamos al local, donde nos sentamos en una de las mesas y comenzamos la charla despues de pedir unas bebidas.

Sentados en aquel lugar, nada ni nadie parece importar mas, ni tan siquiera noto cuando el camarero nos trae nuestro pedido pues mi atencion esta concentrada en una persona solamente. Aioros saca un par de libros que me muestra y que a juzgar por la manera en la que habla, tienen gran valor para el y me da un vuelco el pensar que quiere mostrarmelos.

-Son en verdad hermosos ejemplares y tiene razon, los escritos pueden ayudar en la vida cotidiana, tan solo es necesario prestar atencion a lo que se lee y usar un poquito de sentido comun a la hora de aplicarlo en la practica. A fin de cuentas, los escritores se basan en hechos y en experiencias personales reales a la hora de poner pluma y papel juntos, (riendo) o manos a teclado hoy en dia... (Mis manos rozan accidentalmente las suyas al tomar uno de los libros y hojearlo) Aunque no conozco nada de estos autores, creo que vienen excelentemente recomendados (refiriendome a el) -digo al profesor mirandolo a los ojos y sonriendole.