Aula de frances

Esta manana me llego un comunicado por parte del director, por lo visto voy a tener que tomar una clase extra con un nuevo alumno. El unico problemilla es que voy a tener que echar un broncazo de padre y muy senor mio a los de la oficina, pues cuando tomaron los datos del joven no especificaban si se trata de un alumno principiante, de nivel intermedio o avanzado, lo cual es un autentico engorro puesto que los materiales y el programa de estudios varia enormemente de un nivel a otro.
El dar una clase de idiomas ya de por si es dificil en circunstancias normales, pero el no tener ni la mas minima idea de lo que te espera es aun peor.

Me encuentro algo enojado puesto que he tenido que cargar con un monton de libros y tambien hacer un sinfin de fotocopias de toda clase, muchas de las cuales seguro que tendre que dejar que guarden polvo en los archivos. Por suerte, la artilleria pesada, o sea el material electronico (video, CD, ordenadores, proyector de palabras, etc..) ya estan en la escuela.

Me siento en mi pupitre esperando a que aparezca el joven a quien tengo que darle clases.

Llegué desencantado a esa clase, me habia tocado de rebote, sin esperarlo y me jodío, nadie sabia cuanto, no deseaba aprender el que decían que era el idioma del amor, no puesto que en que podia ayudarme a conocer precisamente eso, el amor...

Abrí la puerta, de un golpe seco, pero no tanto como el portazo que sonó cuando se cerró a mi paso, dejandome ver a mi profesor que se veia realmente enojado, realmente disgustado por tener que estár ahí, al igual que yo.

- ¡Buenas! - dije completamente borde - digame - le hable con respeto - que tipo de aburrimiento va a enseñarme - le provoqué, algo que se me daba realmente bien - ¿se puede dormir en sus clases? - pregunté para acabar de cabrearle.

Me senté, justo frente a él, viendo como de un golpe, sus palmas quedaban grabadas sobre su escritorio, haciendo que diera un brinco por el estruendo, haciendo que lo mirara curioso...

-----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Nena... gracies, encantada de rebre las clases de part teva, XD... T'aviso de que Seiya es un bordegàs torra collons XDD i provará de treuret de pollaguera XDDD. Per cert, em passes el teu mail... així podrem parlar, jo t'envio el meu per privat ara mateix ^__^

Estaba intentando calmarme a la espera de que llegara mi nuevo alumno, preguntandome como seria, cuanto sabia de la materia y si estaria interesado en ella cuando de repente oi un espantoso estruendo y todas las preguntas que me habia estado haciendo mentalmente se respondieron de un solo golpe, !vaya si se respondieron!. Un muchachito moreno, bastante mas bajo que yo y de ojos marrones entro como si fuera un huracan en clase, dando un portazo tan fuerte que crei que a la puerta iban a saltarle las bisagras.

- ¡Buenas!....digame ....que tipo de aburrimiento va a enseñarme.... ¿se puede dormir en sus clases?

Aquellas palabras me confirmaron varias cosas: 1) este no tenia ni la mas minima idea de frances. Lo que en si no es un problema pues puedo ensenar a cualquier nivel, de hecho, es mucho mas facil ensenar a alguien que empieza de cero o idealmente, a un alumno de nivel avanzado que tan solo necesita clases de conversacion y ayuda escasa. Los de nivel intermedio son los que plantean mayores problemas puesto que si en la misma clase te viene gente a niveles diferentes, ya la pifiamos. 2) Es irrespetuoso e irreverente. Yo normalmente soy un tipo serio aunque no me molesta que en clase haya algo de cachondeo puesto que el alumno tiene que disfrutar sus clases, siempre y cuando esto sea dentro de un orden. 3) No esta en absoluto interesado... !Esto si que es un desastre!.

Coloque las palmas encima de la mesa y me levante de sopeton, algo que debio sorprenderle debido a la cara que puso. Le senale donde estaba su asiento.
-Bonjour, Monsieur, asseyez-vous là, s'il vous plaît?

****************************
Mariona, no et preocupis sinó entens el que he possat, d'aixo precissament es tracta. No et preocupis per l'escritura del català, jo tambe tinc dubtes de si una paraula s'escriu amb una s o dues, aquest es tan sols un exemple.

Viendo como sigue respondiendo y el tonito burlon de voz que me usa... definitivamente no tiene ni idea de frances y tampoco parece querer tenerla, o muy equivocado ando, es uno de estos alumnos para los cuales estas clases son obligatorias y para poder aprobar la carrera deben asistir a estas clases. Si hay algo que detesto es que me hagan perder el tiempo y no hay nada peor que un alumno que no siente interes alguno, con uno que no sepa mucho inicialmente o que tenga numerosas dificultades constantemente aunque las clases pueden resultar un tanto aburridas para mi, al menos tengo la satisfaccion de que estan aprendiendo algo y ponen de su parte para que asi sea.
Con un no interesado.... !olvidate!....

Ya veremos que pasa con este pero puesto que esta en mi clase....

-Non, Monsieur, vous ne venez pas ici pour perdre votre temps ou encore pire..... LE MIEN!!- le digo acercandome aun mas a el mientras se rie y volviendo a senalar su silla. Mi expresion facial es mas fria que un tempano y mi mirada dura- Asseyez-vous, maintenant.

Doy una vueltecita alrededor suyo mientras le obligo a sentarse sin necesidad de tocarlo.
-Ya veo que no me entiendes, lo que significa que tendremos que empezar desde cero, lo cual me alegra, porque es mucho mas sencillo a la hora de planificar una clase. Bien, empezare presentandome, mi nombre es Camus de Verseau y sere su profesor de frances durante este a~no academico.

Durante unos minutos le explico la normativa del centro, por ejemplo, que no se puede fumar ni consumir bebidas alcoholicas en clase; que en todo momento debe traer el material pertinente a cada leccion y tambien le explico, ya que es obligatorio, donde se encuentran las salidas de emergencia en caso de incendio o que las alarmas suenen por algun motivo.
-Espero que le quede todo bien claro y en cuanto a las clases... le advierto, senor.... (miro la lista que me dieron en la oficina) Seiya que soy un profesor muy estricto y no me gusta que me hagan perder el tiempo con tonterias, puedo aceptar una broma mientras que no se pase de la raya. Me he explicado lo suficientemente bien?

Fora de joc: no et preocupis per la seriossitat del Camus. Es aixi inicialment.

Rol Off.. Nena, perdona, es que no e pogut passar abans, masses problemes a casa, pero ja esta una mica millor la cosa, així que espero poder entrar mes seguit. Petonet.

----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Lo miro pensativo, la cosa se pone algo seria, a este tipo es fácil sacarlo de sus casillas, o eso parece.

- Pues sí, no entiendo nada de nada - digo apoyandome en la palma de mi mano, mirando hacia otro lado - y ademas, no podríamos hacer algo, me explico, yo no quiero estar aquí, y usted, no creo que tenga ganas de perder el tiempo conmigo... además, no me interesa para nada aprender francés, dirán lo que quieran, que es el idioma del amor y todas esas chorradas que yo no me creo, pero es impensable el que una sola palabra te haga erizar, te haga sentir, yo creo que eso es la persona y no un idioma.

Me quedo mirandole nuevamente, no deseo estar ahí, eso parece un aburrimiento de muerte y tampoco creo que este hombre, pueda motivarme lo suficiente como para aprender.

- Mi proposito de esta clase, por si le interesa, es aprobar ni que sea por los pelos, así que no crea que me voy a esforzar. Sí desea que lo haga, deberá motivarme, y mucho ya que si algo no me interesa de buenas a primeras, es dificil que lo pueda llegar a apreciar.

Esas son mis ultimas palabras, pero puedo verle rojo de la ira que le han causado, quizás me haya pasado diciendo todo lo que pensaba, pero por que ocultarlo, si no encuentra algo con lo que motivarme, le haré la vida imposible, tanto que él mismo pedirá que me echen de la clase.

----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Jejejje, aquest noi es una mica cara dura, deuras tenir paciencia, jajajaja.

Veo que este jovencito me va a acarrear problemas con esa actitud que tiene. No es que nunca antes haya tenido alumnos dificiles, todo lo contrario, pero este por lo menos a primera vista, me va a resultar el mas duro de pelar que los otros. Sus comentarios acerca de la "lengua del amor" en si no es lo que me molesta, a fin de cuentas no fui yo quien invento tal etiqueta y tan solo se trata de una de esas frases publicitarias que usan los de la administracion para tratar de atraer mas estudiantes a la universidad. !Todos tenemos que ganarnos el pan como podemos!
ES su tono burlon, su irreverencia y sus ultimas palabras los me enojan tanto que se muestra visible, muy a mi pesar, en mi rostro, el cual se ha encendido a causa de la ira. Bien, vera que conmigo no se juega y si no se molesta en hacer un esfuerzo ni tan siquiera aprobara.

-Jovencito, ha terminado usted con su pequeno discurso? -le conteste en tono de lo mas condescendiente- dejeme entonces explicarle algo, lo de que el frances es la lengua del amor no es algo inventado por mi. En realidad la frase correcta es que es la lengua de la diplomacia, pero eso es lo de menos....

Doy una pequena vuelta alrededor de su mesa cual aguila en busca de la presa y me paro justo enfrente suyo.
-Algo mas, si usted piensa que tan solo por venir a incordiarme a mi clase va a aprobar, lo lleva claro.... Puede ir olvidandose de eso. No obstante, quiere un aliciente para aprobar frances?.... Digamos, mi querido alumno, aparte de las unidades obligatorias que tenemos que revisar este curso tambien le puedo ensenar otras que no se incluyen en el curriculum y que tal vez le serian de muchisimo mayor interes.

Digo esto con una pequena sonrisa traviesa y regreso a mi mesa. Me siento y lo miro de frente con una ceja levantada y le pregunto.
-Y bien...?

Se enfada, mucho, lo noto por la supuesta indiferencia que pretende mostrar, por que trata de no dejarme ver lo mucho que le molestan mis palabras, eso me divierte mucho, demasiado quizás.

Empieza con su discurso, después de acabar yo el mio, explicandome cosas que realmente, me importaban un pepino, que ni me interesaban, pero tampoco me eran indiferentes, aunque no lo pareciera, había algo en él que lograba captar toda mi atención.

Gira a mi alrededor, sintiendo una calida brisa envolviendo mi cuerpo mientras lo hace, parando en seco frente a mí, susurrando algo, que sí capta mi atención completamente.

Que quizás haya algo que me interese, y todavia me amenaza con que no me será fácil aprobar su clase, pero soy curioso, demasiado y no puedo olvidar esa pequeña provocación, por que a mi entender, esta tratando de hacer eso precisamente, provocarme.

- Y... ¿Qué cree que pueda enseñarme que me interese? - pregunto con su mismo tonito condescendiente, en algun momento deberemos empezar a llevarnos bien, así que a ver que sucede - dígame maestro... ¿A qué se refiere? - pregunto mientras le veo como después de sentarse en su silla y mirarme, espera mi respuesta.

Arqueo una ceja, curioso más que otra cosa, si queria que prestara atención, con esa insinuación lo había logrado.

- Venga maestro - digo impaciente, levantandome de mi silla, saliendo de mi pupitre y llegando a su mesa en la cual me siento y cruzo mis piernas, quedando de costado, pero mirando fijamente sus ojos azules penetrantes - ¿qué es eso que cree que tanto pueda interesarme?

No queria captar su atencion? pues lo habia logrado, lo dificil seria ahora el mantenerla. Trato de que mi rostro siga serio mostrando una cara de poker y me pongo frente a el, mirandolo fijamente y posando mi mano sobre su hombro.
-De verdad, lo quiere saber, mi querido alumno? -le dije algo burlon- vraiment, quelle impacience!!
Dicho esto lo mire de reojo con una pequena sonrisa en mi rostro y me aparte un poco de el.

-Vaya, verdaderamente eres un chico muy curioso... -lo miraba como el gato que juega con el ratoncito antes de clavarle los dientes-... bueno, existen ciertos topicos que no los cubre el programa de estudios que siempre y cuando no tengas inconveniente y no te ofendas puedo ensenartelos.

No anadi mas para ver que reaccion tenia aquel ultimo comentario que era uno de doble sentido, tal como era mi intencion, el manejo de las palabras es algo que se me da muy bien y no en vano soy profesor de idiomas.
-Pero creo que te seran de mucho interes... y utilidad....

Capta mi atención, vaya que sí, y no solo eso, si no que además logra que aumente mi curiosidad con sus palabras.

- Ne, ne... Profesor... ¿a qué se refiere? digame... - tomo mi menton de una forma encantadora, pensando el lo que podría ser.

Su mano se posa en mi hombro y soy un salto por lo inesperado que me resulta y entonces se me ocurre algo, algo que sus palabras me llevaron a idear.

- Oiga profesor... por que debería ofenderme, acaso piensa enseñarme, o quizás hacerme algo que crea que no me guste? - pregunto llevando un dedo a mis labios, arqueando una ceja, pensando en lo que precisamente él, estaria tramando.

Lo miro, trato de averiguar algo viendo sus ojos, ojos expresivos, ojos para que negarlo... preciosos.

El ambiente parece relajarse, a ver si al final, este tiene algo que enseñarme, algo que pueda entretenerme, algo con lo que pueda calmar mi curiosidad.
Le veo de frente, como me mira, como trata de también averiguar lo que pienso, consiguiendo que me ponga tenso, nervioso sin saber muy bien lo que esperar.

- Y.... ¿empezamos la clase?

-Algo que no te guste? -le pregunte enarcando una ceja y riendo un poquito- claro que no, jamas se me ocurriria hacer tal cosa. (Mi voz se vuelve algo sugerente) todo depende de que sea capaz de encontrar algo que te guste y te ayude a mantener la concentracion.

Sino otra cosa, por lo menos, por ahora he podido captar su atencion.
-Puedo ensenarte a decir palabrotas en frances, todas las ordinarieces que se te ocurran y mas, pues a fin de cuentas uno tiene que saber cuando le insultan en otra lengua y ser capaz de responder, no crees? -pausa- o, tal vez, preferirias usarlo como arma de seduccion. A muchas chicas les vuelve locas el acento frances...

Me acerco a el y lo miro de frente, a esos bonitos ojos oscuros suyos. El chico es un descarado pero es bastante guapo.
-Dime, pues, Seiya, te interesaria aprender ese tipo de cosas o .... algo diferente?

!Resultado!... o al menos eso parece, pues tengo la impresion de que mis sugerencias le estan despertando de veras la curiosidad y si acaso el nivel de atencion ha aumentado. No obstante, muestro serenidad en mi rostro, no sea que si ensenara hasta la mas minima sonrisita triunfadora me enviara a paseo, mejor que no, sigamos tentando las aguas con calma.
-Si, en efecto seria muy util poder responder a un insulto... sobretodo si en un principio pretendes que no te has enterado de nada, mon cher, el corte que se llevaria esa persona seria simplemente sublime.

*Palabrotas en frances demasiado finas??? !Ay, mi pequeno!, lo que te queda por aprender... Si de verdad crees que Va te faire enculer!, allez au diable!, va te faire foutre!... y otras tantas gemas de nuestra lengua son refinadas, yo soy el angelito de la guarda*

Enarque una ceja.
-Demasiado finas? De veras eso crees? Tal vez la lengua francesa no tenga los sonidos guturales de la castellana, pero creeme que las expresiones son tan insultantes como las de ese idioma y ademas -hice un pequeno gesto con una mano enfatizando mis palabras- no es siempre lo que se dice, sino COMO se dice lo que causa tal efecto.

Aun seguia cerca suyo y lo mire de frente mientras notaba como la curiosidad de aquel jovenzuelo aumentaba por momentos pues habia dejado mi ultima frase con un toque de ambiguedad o quizas incluso de doble sentido (o double entendre, como decimos en mi idioma natal) a proposito. No se que le habria dado por pensar...
-Las otras cosas son muchas y variadas, pero antes de correr, uno debe saber caminar, no crees? -le pregunte de forma lo mas enigmatica posible.

____________
Hola, Mariona, no et preocupis. Aquestes coses passen.

Le veo pensativo, supongo que satisfecho por haber conseguido captar toda mi atencion, pero su silencio me incomoda demasiado...

De pronto vuelve a hablar, haciendo que olvide lo que yo pensaba y consigue que mi curiosidad aumente todavía más a pesar de no entender muy bien lo que dice.

- Oiga... yo no entiendo muy bien lo que dice, pero sí, enseñeme, digame todo lo que sabe, todo lo que debo hacer!! - pido, casi ordeno, muerto por la ansiedad - que quiso decir con lo de caminar?? - pregunto sintiendome algo ridiculo, pero así es, no entendí la metafora y necesito que me la explique.

Lo mire de soslayo notando la palpable curiosidad que el muchacho sentia porque le ensenara lo que debia aprender, ciertamente le habian intrigado mis palabras aunque no captara del todo bien su sentido. Esos bonitos ojos marrones brillaban llenos de curiosidad iluminando su rostro y haciendo que este tomara una apariencia mucho mas animada que la que traia antes de pasar por la puerta y ponerse en plan insolente conmigo.
-Mon petit choux -le dije usando un termino de frances familiar, me acerque a el y toque su rostro brevemente tan solo con las yemas de mis dedos antes de apartarme de el- lo que quiero decir es que antes de poder llevar a cabo una comunicacion adecuada, uno tiene que aprender las tecnicas basicas.

Asi que di comienzo a la clase, empezando primero por que aprendiera el alfabeto fonetico, o sea como se pronuncian las diferentes letras y las combinaciones de letras en la lengua francesa. Varias veces tuve que corregirle porque su acento no era siempre inteligible, no obstante, tampoco podia pedirle demasiado pues era solo su primer dia.
Despues pasamos a unas cuantas palabras basicas de saludos, despedidas, etc... que le servirian para por lo menos abrir una conversacion y le pedi que las escribiera.

Mientras que lo hacia me acerque a el y mire de reojo las notas de su cuaderno viendo algunos errores de escritura, los cuales senale con el dedo, aunque casi sin darme cuenta estaba rozando la mano con la que escribia.

Que contradicción. Esto empieza a interesarme y mucho, no se... será la fragancia que desprende este francés, que quizás lo meloso que suenan las palabras que trata de enseñarme, esa forma que tiene de insistir tratando que entienda, corrigiendo cada una de las meteduras de pata que hago.

- Bon jur... - digo, y enseguida viene y me corrije, indicandome donde y como debo pronunciar.

Sonrio como un bobo, mientras su mano roza la mia casi sin darse cuenta y rapidamente la aparto al sentirme un poco incomodo.

- y bien... ¿cuando pasamos a las palabrotas y las cosas interesantes? - pregunto nervioso, desviando mi mirada de la suya, de esos mares profundos y penetrantes que tiene que me ponen muy pero que muy nervioso y aun no se bien por que.

De nuevo, queda mirandome fijamente, sin inmutarse, aprovechando su madurez ante mi ingenuidad, haciendo que me sonroje demasiado, que me estremezca y sienta verguenza por ese modo de mirarme.
Mi corazón palpita fuerte, muy deprisa, y mi mente divaga en si levantarme de la silla y largarme o esperar a ver si es verdad que tiene cosas más interesantes que enseñarme, más que cuatro palabras que no creo que jamás utilice, y mucho menos que las llegue a escribir alguna vez en mi vida...

----------------------------------------------------------------------------------

Perdonam, de veritat, la meva vida es un caos y no puc contestar tan aviat com voldria.

Petons, Bon Nadal!!!

No et preocupis, jo he estat malalta tota aquesta setmana i encara no m'he recuperat del tot.
__________________________________________________________________________________________

Su nerviosismo era mas que palpable, no solo en el ligero sonrojo de su rostro y en la forma en la que me miraba o quizas se hubiera sentido incomodo, quien sabe? Igual se sentia avergonzado al no saber pronunciar bien o escribir correctamente las palabras que le habia ensenado.
Lo cierto es que aunque tratara de ocultarlo y sonar atrevido al preguntarme si ibamos a hacer algo mas interesante que lo que llevabamos haciendo hasta ahora.
-Hummmm.... !que impaciente! -le dije mirandolo de nuevo.

Se levantaria de la silla? Me mandaria a freir esparragos?
-Cierto que es buena idea el aprender palabrotas y demas..., pero primero hay que saber pronunciarlas bien. Claro que eso no es cosa que se aprenda en un dia.

Me acerque de nuevo a el y me sente a su lado, de tal forma que no pudiera desviar la mirada.
-Esta bien, Seiya, te ensenare lo que me pides. Dime, por donde empezamos? Que clase de nombres te gustaria llamarle a tu profesor? -le dije en tono algo burlon.

Si aquello no despertaba su interes, la verdad que no se el que lo hara.

- ¡JA! - grité euforico - al fin cosas interesantes - reclamo, tratando solo de llamar su atención o quizás de provocarle.

Sonrio y parpadeo de un modo encantador, prestando toda mi intencion a sus palabra, algunas ciertas, pero otras que poco me importan...

- ¿Que importa pronunciarlas bien si se ve la cara del que las dice? - pregunto curioso - la verdad me importa muy poco,todo se nota en la mirada, sobre todo, las malas intenciones. Solo quiero culturizarme en ese aspecto y aprender como pueden llamarme esos tipos.

Quedo pensativo, tomando mi menton, pensando en algo que tambien me gustaria aprender, pero sintiendo verguenza al hacerlo pero armandome de valor para poder decir lo que me intriga en este preciso instante.

- Esto... - dudo si decirlo o no - verá... - digo educadamente, puesto que voy a pedirle algo y lo haré con toda la educación que me enseñaron - yo quisiera saber... quisiera que me explicara... - siento subir el sonrojo desde mis labios hasta mis ojos, sin olvidar mis orejas - ¿es cierto que el Frances es el idioma del amor? - pregunto curioso, muy sonrojado, pudiendo apreciar una pequeña sonrisa en sus labios - digame... ¿por que lo dicen? ¿acaso los franceses tienen algo que no poseemos los japoneses?

Pregunto queriendo morir de la verguenza, sintiendo que lo haré si no responde rápidamente, pero realmente es algo que me intriga, el como y el porque lo diran, suponiendo que no podia ser una leyenda urbana, ya que lo había escuchado de demasiadas personas mientras desvio mis ojos al pupitre, sintiendo un calor recorrer mi cuerpo, incluso notando mis manos temblar nerviosas por que se ria de mi pregunta.

-------------------------------------------------------------------------------------------------------

Bufona, espero que aviat estiguis molt bé. Millorat aviat. Una abrassada molt forta.

Mis palabras y acciones tienen desconcertado al chico, !innegable! y a decir verdad, ese efecto era exactamente algo que deseaba conseguir. Seiya esta algo sonrojado pues debio pillarle por sorpresa la oferta de cubrirme en insultos en mi propia lengua... !lo que un profesor tiene que hacer para lograr la concentracion de sus pupilos!...
Segui sentado a su lado y para sacar mayor provecho a la situacion, lo mire mucho mas intensamente de lo que lo habia hecho hasta ahora, a fin de cuentas me pregunto si era verdad el consabido cliche acerca del frances. Si es verdad o no, me importa bien poco, pero si se dice tanto... por algo sera, ya se sabe, donde hay humo, hay fuego.

Me imagino que se debe a la musical pronunciacion de las palabras, el tono de canturreo que hay al hablar la lengua y tambien al hecho de que los miembros de las antiguas cortes reales francesas tenian la reputacion de ser muy galantes y esa galanteria era impudicamente usada como devastadora arma de seduccion.
No obstante, todo esto lo pense en silencio, pues este muchacho se hubiera aburrido con tal perorata, creo que con el funcionan mejor las acciones.

-No se que decirte al respecto, Seiya -esta vez mi mano acaricio levemente su cuello- en mi opinion el amor o cualquier tipo de sentimientos, ya sea odio, repulsa o... atraccion (enfatice esta palabra) tienen su propio lenguaje.

Note que su piel se erizaba al suave contacto y segui hablando y acariciandolo.
-La lengua usada al expresarse es irrelevante, no crees? El ser frances o japones es lo de menos... es lo que se hace, lo que cuenta, mi estimado alumno. Quizas has visto algo diferente?

A pesar de la seriedad reflejada en mi rostro (o sea, mi cara de jugador de poker)el enojo inicial que hacia el habia sentido, se habia ido esfumando lentamente puesto que ante mi tenia no a un muchachito descarado y deslenguado, sino a uno nervioso e inexperto en ciertos temas.
Puedo notar que mis leves roces no le han sido indiferentes, pues un cierto temblor recorrio su cuerpo cuando lo toque. Se que en estos momentos quizas desearia estar lo mas lejos posible de aqui, pues esta sonrojadisimo y aunque aun tiene el valor de hablar, no las tiene todas consigo e incluso intenta desequilibrarme.

Hora de subir el nivel de este jueguecito y de saber cuan lejos esta dispuesto a llegar...
No me movi de donde estaba y aun muy serio le pregunte en voz baja cerca de su oido.
-Que es lo que deseas saber mi querido alumno?... se trata en realidad de algo que tiene que ver con la lengua francesa o quizas... es otra cosa para la cual los idiomas no son barrera?

Mi cuerpo tiembla enloquecido, confuso por esas esxtrañas sensaciones que está provocando en mi persona tanto juego tanto roce, tanta palabreria que sin lugar a dudas me confunde aún más y me hace sentir temor a la par que curiosidad.

Me estremezco nuevamente cuando se inclina y susurra esas palabras, haciendo que me sonroje más aun si es que se puede, haciendo que me levante asustado, que retroceda tratando de alejarme de ese cuerpo suyo que empieza a atraerme, que empiezo a sentir una extraña necesidad de acariciar suavemente igual que él hizo.

Camino hacia atrás olvidandome de que no estoy en un aula llena de mesas y sillas, esas que precisamente se amontonan y chirrian con mis pasos hasta que no tengo más espacio y tropiezo para depués caer de bruces al suelo, mirandole, viendo esa sonrisa que da miedo, tratando de descifrar si fui demasiado obvio con mis preguntas.

- ¿Que... que es lo que pretende? - pregunto tratando de moverme cosa realmente imposible por que me encuentro enredado en las patas de las mesas y sillas que me hicieron caer.

La forma en la que reacciono si la hubiera visto en una pelicula me habria parecido enormemente comica, pues no crei haberle dicho nada que tuviera que hacerle practicamente huir de mi.
Me acerque a el, tendiendole una mano para ayudarle a levantarse.
-Ciertamente no pretendia que practicamente salieras como alma que se lleva el diablo -le respondi tomando su mano sin esperar permiso por su parte- aqui estoy para dar clases y para que mi alumno aprenda algo. Lo que ese algo sea... depende de el...

Vi que se habia hecho un pequeno corte del cual salian unas gotitas de sangre, nada serio, pero lo suficiente como para tener que registrarlo en el Libro de Accidentes. Fui al botiquin y saque unas toallitas desinfectantes para limpiarle el corte. El humedo contacto del alcohol que tienen impregnado le hizo estremecerse un poco puesto que debio escocerle, !eso si!, sobreviviria.
-Sera mejor que te sientes o por lo menos que te estes quietecito... -tras dejar el botiquin bien colocado en la repisa, lo tome por la cintura- a menos que quieras causarte otro percance... o que quieras dar la clase por terminada...

Recordando lo sonrojado que se habia puesto antes no pude resistir echarle otro comentario puesto que presentia que no eran exactamente lecciones de frances lo que queria, el chico buscaba algo mas... o al menos, eso me parecia.
-Sabes que el rojo te sienta muy bien, Seiya?

Mi corazón latía tan fuerte que pensaba que se saldria de mi pecho y correria a esconderse, justo lo que yo deseaba, justo lo que no podía hacer al encontrarme entre las patas de las mesas y las sillas.

Me sonrojo, muerto de la verguenza por mi torpeza, más cuando llega y me ofrece su mano para ayudarme a levantarme.

- Gra... gracias... - susurro mirando a otro lado, completamente avergonzado, sin conseguir que mi corazón lata así de acelerado. Cosa que se me dificulta cuando tras rozar un pequeño cortecito que me hice en la frente con un algodon impregnado de alcohol me agarra por la cintura para ayudarme a acomodarme, añadiendo que vaya con cuidado para no termnar peor de lo que ya estoy, complementando la frase.

Me quedo perplejo, en verdad tan mal no lo estaba pasando, realmente provocar a este frances me divertia, asi que negue para comunicarle que allí seguiria.

- Maestr... - empecé a decir cuando dice algo que me deja peor de lo que ya estaba, sintiendo el calor quemar mis orejas, sintiendo que moriria de la verguenza.

Trato de resignarme, a la vista está que es más inteligente y sabio. Me enfurruño, queriendo hacer algo, queriendo demostrar que tambien yo podia ser un atrevido como él estaba siendo, queriendo hacerle ver que podia aun molestarle.

- Verá maestro... siempre llevo mi musculosa roja por que se que es el mejor color que adorna mi piel bronceada, igual que el azul es el que mejor combina con su preciosa piel blanca... - digo callando ipso facto, dandome cuenta que lo que mis labios pronunciaron eran halagos, halagos que nunca hubiese imaginado decir, menos a alguien que me estaba provocando, pero tomando consciencia de que lo había hecho, esperando algun tipo de respuesta sonrojado mirando al suelo.